Foto: La Industria |
UN BAILE QUE FORMAR PARTE DE LA IDENTIDAD DE LOS PERUANOS POR SU RAIGAMBRE HISTÓRICA.
El garbo, la seducción y destreza que desborda una pareja que baila marinera se ha convertido en un espectáculo tradicional en nuestra ciudad y embelesa al público en el momento que se ejecuta.
Como la cereza en el pastel, la salerosa marinera parece ponerle el detalle casi perfecto a la organización de un evento, su cuota de elegancia y sello trujillano a una reunión familiar, una visita protocolar o un spot publicitario.
No hay duda que este baile representativo del norte, declarado Patrimonio Cultural de la nación, ha logrado posicionarse como marca nacional y un arte profesional que trasciende y apuesta por lo nuestro.
En tanto, para algunos trujillanos, esta danza es todavía un universo inexplorado que solo disfrutan con el deleite visual de apreciar las innumerables presentaciones que se desarrollan en concursos de marinera o celebraciones oficiales que se ofrecen al público.
No es complicado saber porqué este baile de pareja que incita al cortejo, donde ambos ‘sacan chispas’ con su ágil zapateo, la mujer contonea las caderas para demostrar la naturaleza de su femineidad y el varón hace lo propio con su galanteo, deja casi siempre al público boquiabierto y deseoso de escuchar “porque no hay primera sin segunda. Con ustedes, marinera del Perú”.
Están invitados no sólo a admirarla, sino también a aprenderla.
Fuente La Industria
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